Manifiesto frente a la Democracia del Poder
LO QUE HAY...LA REALIDAD
La democracia QUE ESTABLECE EL PODER sirve para domesticar a la gente, y para recortarles ese vuelo de ciudadanos libres. Una democracia a la que hay que proteger, ha dejado de ser una democracia. Por eso, cuando alguien dice, "Señores, la democracia está en peligro", o "Hay que proteger la democracia", en realidad, lo que está tratando de decir desesperadamente es, "Señores, están en juego los intereses del Poder", y la ciudadanía a estas alturas ya no puede creerse ese cuento. ¿Ejemplos claros?, Allí tienen ustedes, la tremenda estupidez del voto crítico, levantada por la izquierda de este país en complicidad con las parasitarias ONGs, que llevó al Sr. Kuczynski Godard al Poder, y que, hoy, un año después, ese Gobierno que dirige se cae a pedazos, producto de la falta de solvencia moral, los desatinos políticos y su cuestionada implicancia en delitos de corrupción que están a punto de llevarlo a ser vacado. Su empatía con la gente, nula. ¿Otros ejemplos?, tienen ustedes al Sr. Alejandro Toledo, expresidente de la República, quien en nombre de esta seudodemocracia ha cometido actos de corrupción, y allí lo tienen hoy, prófugo de la justicia para no ir a la cárcel. Alan García, Susana Villarán, Luis Castañeda, ex alcaldesa y actual alcalde de Lima, también cuestionados duramente. Por esta democracia, tenemos hoy en día dos expresidentes recluidos en la cárcel, y una Sra Keiko Fujimori, ad portas de la misma, sino es por una bancada mayoritaria en el Parlamento que la respalda.
Todo ello no hace más que afirmarnos cada día esa gran mentira de la famosa teoría popular del "mal menor" que los operadores políticos y los medios de comunicación tejen al final de cada elección, merced de encuestas que dicen aplicarse, y que ¡oh, sorpresa!... nadie nunca da razón de estas. (...) De estas experiencias solo se puede deducir algo, que el futuro de las naciones depende de la educación de las masas. Por eso, es necesario que la ciudadanía, hoy más que nunca, empiece a escribir, a cuestionar, a investigar por su cuenta. La gente tiene que empezar a leer, a escuchar, porque pareciera ser que de un tiempo acá la verdad se ha vuelto más relativa que de costumbre, en fin, y en parte eso es bueno, porque representa una gran oportunidad moral para el surgimiento de nuevos líderes políticos, de nuevos líderes de opinión, y es responsabilidad de las prensas alternativas independientes ayudar a promoverlos, al margen de la edad o la procedencia de estructura social.
PREGUNTA Y RESPUESTA
Frente a esto, bajo mi particular visión, no veo más allá que una salida sincera, dos diría yo, el cuestionamiento y la crítica respecto al engaño, la doble moral y lo que tenga tinte de conformismo y resignación, y dos, el trabajo diario sobre la consciencia y la educación de la gente, principalmente de las nuevas generaciones que son beneficiarias directas, al final, de nuestras decisiones presentes. Escribo esto, y pienso en la burla inmensa que los poderes de las distintas democracias del mundo ejercen sobre sus pueblos, a sabiendas de que siempre obtendrán como respuesta, complacencia y sumisión por parte de estos debido a la poca o nula capacidad de reacción organizada, de allí que siempre manifieste, que la consciencia empodera al individuo; expreso esto, y vuelvo a pensar, esta vez en las piezas teatrales de BAMBILANDIA, de la austriaca Elfriede Jelinek,"¿Nosotros hacemos lo que queremos? No, no siempre podemos hacer lo que queremos. Pero no por eso hacemos un escándalo. Somos "auténticos".
Lima, Perú Víctor Abraham
La democracia QUE ESTABLECE EL PODER sirve para domesticar a la gente, y para recortarles ese vuelo de ciudadanos libres. Una democracia a la que hay que proteger, ha dejado de ser una democracia. Por eso, cuando alguien dice, "Señores, la democracia está en peligro", o "Hay que proteger la democracia", en realidad, lo que está tratando de decir desesperadamente es, "Señores, están en juego los intereses del Poder", y la ciudadanía a estas alturas ya no puede creerse ese cuento. ¿Ejemplos claros?, Allí tienen ustedes, la tremenda estupidez del voto crítico, levantada por la izquierda de este país en complicidad con las parasitarias ONGs, que llevó al Sr. Kuczynski Godard al Poder, y que, hoy, un año después, ese Gobierno que dirige se cae a pedazos, producto de la falta de solvencia moral, los desatinos políticos y su cuestionada implicancia en delitos de corrupción que están a punto de llevarlo a ser vacado. Su empatía con la gente, nula. ¿Otros ejemplos?, tienen ustedes al Sr. Alejandro Toledo, expresidente de la República, quien en nombre de esta seudodemocracia ha cometido actos de corrupción, y allí lo tienen hoy, prófugo de la justicia para no ir a la cárcel. Alan García, Susana Villarán, Luis Castañeda, ex alcaldesa y actual alcalde de Lima, también cuestionados duramente. Por esta democracia, tenemos hoy en día dos expresidentes recluidos en la cárcel, y una Sra Keiko Fujimori, ad portas de la misma, sino es por una bancada mayoritaria en el Parlamento que la respalda.
Todo ello no hace más que afirmarnos cada día esa gran mentira de la famosa teoría popular del "mal menor" que los operadores políticos y los medios de comunicación tejen al final de cada elección, merced de encuestas que dicen aplicarse, y que ¡oh, sorpresa!... nadie nunca da razón de estas. (...) De estas experiencias solo se puede deducir algo, que el futuro de las naciones depende de la educación de las masas. Por eso, es necesario que la ciudadanía, hoy más que nunca, empiece a escribir, a cuestionar, a investigar por su cuenta. La gente tiene que empezar a leer, a escuchar, porque pareciera ser que de un tiempo acá la verdad se ha vuelto más relativa que de costumbre, en fin, y en parte eso es bueno, porque representa una gran oportunidad moral para el surgimiento de nuevos líderes políticos, de nuevos líderes de opinión, y es responsabilidad de las prensas alternativas independientes ayudar a promoverlos, al margen de la edad o la procedencia de estructura social.
PREGUNTA Y RESPUESTA
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| Foto: Internet |
Luego, habría que preguntarnos qué clase política, con toda su prole incluida, es la que quiere heredar el país los próximos treinta años. Basta y sobra decir, que en una democracia falsa donde se resguarda el poder del que dirige y controla, un ciudadano carente de pensamiento divergente, de análisis y cuestionamiento siempre resulta desprotegido, propenso a que se le diga, "Mira, tú puedes elegir quién debe gobernarte, ¿Viste que somos "democráticos? ¿Viste que convocamos a elecciones libres?". Tremenda mentira, porque un poblador convocado cada cuatro o cinco años para elegir entre quienes tienen el poder de mover inmensos y millonarios procesos de inscripción electoral, nada reales al ingreso diario de un jornal decente, siempre resultará estafado y nada representado, porque no conozco, al menos yo, a alguien sensato que piense, por ejemplo, que un mafioso, bajo el cliché de "empresario", pueda ser símbolo de representación de su propia comunidad, de su propia familia. No, la democracia, desde siempre ha sido eso, juego de poderes, de mentiras y falsas denominaciones, gente real que termina decidiéndose al final por gente irreal.
Frente a esto, bajo mi particular visión, no veo más allá que una salida sincera, dos diría yo, el cuestionamiento y la crítica respecto al engaño, la doble moral y lo que tenga tinte de conformismo y resignación, y dos, el trabajo diario sobre la consciencia y la educación de la gente, principalmente de las nuevas generaciones que son beneficiarias directas, al final, de nuestras decisiones presentes. Escribo esto, y pienso en la burla inmensa que los poderes de las distintas democracias del mundo ejercen sobre sus pueblos, a sabiendas de que siempre obtendrán como respuesta, complacencia y sumisión por parte de estos debido a la poca o nula capacidad de reacción organizada, de allí que siempre manifieste, que la consciencia empodera al individuo; expreso esto, y vuelvo a pensar, esta vez en las piezas teatrales de BAMBILANDIA, de la austriaca Elfriede Jelinek,"¿Nosotros hacemos lo que queremos? No, no siempre podemos hacer lo que queremos. Pero no por eso hacemos un escándalo. Somos "auténticos".
Lima, Perú Víctor Abraham
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